Método

1)Remover la harina y 1 cucharadita de sal en un bol. Reservar.

2)Mezclar el agua, la levadura y el azúcar en un bol grande. Dejar reposar hasta que la levadura empiece a formar una espuma cremosa, unos 5 minutos.

3)Incorporar la mitad de la mezcla de harina a la mezcla de levadura hasta que no queden puntos secos. Incorporar el resto de la harina, 1/2 taza cada vez, mezclando bien después de cada adición. Cuando la masa se una, pásela a una superficie ligeramente enharinada y amásela hasta que esté suave y elástica, unos 8 minutos.

4) Engrasar ligeramente un cuenco grande, colocar la masa en el cuenco y girarla para cubrirla de aceite. Cubrir con un paño ligero y dejar que suba en un lugar cálido a una temperatura de 27 a 35°C hasta que doble su volumen, aproximadamente 1 hora. Golpear la masa, dividirla en 4 partes iguales y formar una bola con cada una de ellas.

5)Precalentar el horno con una piedra para pizza a 260°C.

6)Estirar y golpear una bola de masa para formar un círculo de 2,5 cm de diámetro. Coloque la masa en una paleta de pizza ligeramente enharinada. Tome la salsa de pasta de tomate que le haya sobrado para utilizarla como salsa de pizza en la base y extiéndala hasta cubrir 2 cm del borde de la masa. Coloca 5 rebanadas de queso mozzarella sobre la salsa sobrante y, a continuación, coloca 5 hojas de albahaca encima. Rociar la pizza con 1 cucharada de aceite de oliva y espolvorear con sal marina al gusto. Repite la operación con las 3 bolas de masa restantes.

7)Hornea hasta que el queso esté burbujeante y la parte inferior de la corteza esté dorada, de 5 a 7 minutos