Descubre qué es un subwoofer y para qué sirve para sacarle el máximo rendimiento para conseguir una experiencia de lo más realista e inmersiva posible.

Subwoofer es un término que aparece en las especificaciones de muchos dispositivos audiovisuales. Y en ocasiones, aparece destacado como elemento diferenciador entre un modelo medio y uno de alta calidad. Sin embargo, no todos los usuarios tienen clara su función. Por eso, en este artículo te contamos qué es un subwoofer y para qué sirve, puesto que está muy presente en el catálogo de productos de Grundig, como por ejemplo las barras de sonido.

Qué es el subwoofer

Un subwoofer es un altavoz de frecuencias graves, es decir, las más bajas del espectro audible. Con el término de ‘espectro audible’ se conoce al rango de frecuencias que puede percibir un oído humano sano, que va desde los 20 Hz a los 20.000 Hz (o 20 kHz). Cada subwoofer abarcan un rango de frecuencias distinto, pero por lo general suelen centrarse en aquellas que van desde los 20 Hz hasta los 80 Hz. 

En realidad, también existe la palabra woofer para indicar un tipo de altavoz que reproduce frecuencias bajas y medias, en ocasiones entre 40 Hz y 1.000 Hz. Sin embargo, como puede entenderse, el subwoofer se trata de un elemento aún más específico y especializado en este tipo de sonidos graves.

Para qué sirve un subwoofer

Para explicar qué es el subwoofer y cuál es su función, podemos usar una metáfora, si se nos permite la comparación y salvando las distancias y diferencias: el subwoofer es como el bajo de una banda de rock. Es decir, se encarga de los sonidos más graves que, por lo general, no tienen un papel protagonista, pero son la clave para dar un verdadero empaque a lo que se escucha.

En concreto, el subwoofer adquiere todo su sentido en sonidos de acción como estruendos o disparos. Y aunque parezcan secundarios, ese tipo de sonidos son los que de verdad imprimen un carácter realista e inmersivo para el espectador de una película o para el jugador de un videojuego. Si se reproducen con efectividad, el usuario sentirá que está viviendo la experiencia en primera persona.

En qué dispositivos encontramos subwoofer

Ahora que ya sabemos qué es un subwoofer y para qué sirve, es el momento de conocer sus aplicaciones prácticas. En líneas generales, podemos decir que los subwoofer (integrados o inalámbricos) están presentes en aquellos equipos de sonido “.1”, como los 2.1, los 5.1, etc. Esos números hacen referencia a los canales por los que se reproduce el audio. Por ejemplo, un sistema 2.1 suele contar con dos altavoces para frecuencias medias y altas y uno para las frecuencias bajas.

Este sistema multicanal se puede encontrar en muchos equipos sonoros. Por ejemplo, en algunos conjuntos modestos de altavoces para ordenador, pero también en equipos de música verdaderamente profesionales.

Pero no cabe duda de que el subwoofer está muy asociado a las barras de sonido, que se suelen emparejar al televisor principal de una casa, como el del salón. De hecho, no suele ser habitual que un televisor cuente con un sistema de audio multicanal “.1”, ni siquiera en los modelos de muchas pulgadas. Por ello, se recurre a las barras de sonido para alcanzar el verdadero salto de calidad que se espera en un televisor de esas características. Eso puede hacerse, por ejemplo, con los modelos GSB 950 Dolby Atmos o GSB 910 SW de Grundig.

Cómo valorar la calidad de un subwoofer

Hay muchas especificaciones técnicas que nos permiten entender si estamos ante un subwoofer de calidad. Las pulgadas del driver, el diseño de la caja, su carácter activo o pasivo, etc. Sin embargo, esos detalles no son tan relevantes para un usuario medio, pues no es habitual adquirir un subwoofer independiente para uso doméstico. De hecho, por precio y complejidad, esto está solo al alcance de usuarios profesionales y expertos en la materia.

Pero el detalle técnico en el que sí te puedes fijar es la potencia. Además, se suele proporcionar en las especificaciones de las barras de sonido, expresándose en vatios (W). Por lo general, cuanto mayor sea la potencia, mayor será la calidad del dispositivo sonoro, aunque en realidad tener demasiados watios puede suponer un auténtico desperdicio en un salón mediano e incluso grande, pues las mayores potencias están pensadas para grandes salas y recintos.

La potencia de un equipo de audio se suele expresar por medio de la potencia nominal o efectiva (RMS, Root Mean Square, por sus siglas en inglés) y hace referencia a la potencia que admiten sus altavoces antes de que distorsionen. La cifra en W puede ser total, es decir, sumando la potencia individual de cada altavoz, pero también es posible especificar ese reparto de potencias. Por ejemplo, una barra de sonido 2.1 puede tener una potencia RMS 80 W, con un reparto de 20 W x 2 + 40 W (subwoofer). Es decir, cada altavoz ‘normal’ (de frecuencias medias y altas) tendría 20 W, mientras que el subwoofer tendría 40 W.

A quién va dirigido un equipo con subwoofer

Un equipo con subwoofer es, por su propia naturaleza, un sistema multicanal. Y cabe recordar que esto está estrechamente relacionado con el efecto envolvente o surround, típico de los cines. Es decir, aquel sonido que llega al espectador desde diferentes ángulos. Por ejemplo, en un sistema 2.1, se podría emplazar un altavoz a cada lado del televisor y el subwoofer en el suelo o en una esquina, a cierta distancia de la pared para evitar el efecto rebote. Y en un equipo 5.1, los altavoces podrían repartirse también a los lados de la sala o por detrás del espectador.

Por ello, los usuarios que más disfrutarán del subwoofer son los cinéfilos, en especial los apasionados del cine de acción, pues podrán recrear en su salón una auténtica sala de cine. Y en esa línea estarán también los gamers que buscan el mayor grado de inmersión en cada partida, especialmente si acostumbran a jugar en el televisor principal y sin auriculares. Por último, no podemos olvidarnos de los amantes de la música que dan mucha importancia a la calidad del sonido, especialmente si tienen la posibilidad y la intención de montar su propia sala de baile en casa.